Entonces asumes que nuestras palabras, nuestros acentos, nuestros gestos, se han confundido de tanto desgastarlos en estupideces que nunca nos llevan a nada y que por eso, ahora, callamos y nos miramos de reojo simplemente para cerciorarnos de que ahí seguimos, ausentes... Recordaremos borrar de la memoria aquellos renglones que cuenten las ausencias más cortas, así andaremos ausentes pero centrados. Centrados pero ausentes...
¿No te pasa que, algunas veces, no tienes ni puta idea de cómo quieres estar?.
La comunicación que se establece entre lo que uno dice y lo que los demás entienden queda en ocasiones frenada por el impacto de la interpretación que cada uno hace de las palabras, de las ideas, de los textos... Si traspasamos la cuarta pared el diálogo será más fluído. Que todo fluya pues...
miércoles, 28 de marzo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La Vida
La vida, ese viaje que a veces parece que no va a ninguna parte, así que optas que por lo menos que sea lo más llevadero posible. No nos eng...
-
No somos nada, aun. Pero al mismo tiempo, desde nuestra humilde condición de humanos, tratamos de transformar agua, viento y olores en palab...
-
Cuando despegas sobre una ola, oscilando sobre un trozo de tabla, eres al mismo tiempo pez y ave. En cada momento de dicha y de temor, se no...
-
¿Y si “colorín-colorado” este cuento no se ha acabado?. ¿Y si en vez de comer perdices se liaron a hostias? Y si todos los cuentos clásicos ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Traspasa tú también el muro y dime...